*-Gora

Lugar sagrado: Lago Antañavo (Madagascar / África) - ALMAS EN LOS COCODRILOS



En el País Antankarana (antigua provincia de Antsiranana, hoy regiones de Diana y Sava, en el norte de Madagascar, frente a la costa sudoriental africana), se encuentra el lago Antañavo.

Cuentan las ancianas y ancianos del pueblo antankarana que hace mucho tiempo, donde hoy se ubica este lago, existía una gran aldea que contaba con su rey, príncipes y princesas, y estos tenían grandes manadas de vacas y campos de yuca, patatas y arroz.

Mezclados entre la población, vivían también un hombre y una mujer bastante jóvenes, que recientemente se habían casado y tenían un niño de unos seis meses de edad.

Una noche, el niño empezó a llorar, sin que la madre supiera qué hacer para calmarlo.

A pesar de las caricias de la madre, de mecerle en sus brazos y de intentar darle de mamar, el niño no cesaba de llorar y gritar.

Entonces, ella lo tomó y se fue a pasear con él por las afueras, sentándose junto al gran árbol de tamarindo, el mismo bajo el cual se solían reunir todas la mujeres del pueblo, para moler el arroz.

 La joven pensaba que la brisa y el frescor de la noche calmarían al niño.

Y efectivamente, en cuanto ella se sentó, el niño se calló y se quedó dormido.

Entonces, suavemente, volvió para la casa para estar con su marido.

Pero nada más cruzar la puerta, el niño se despertó y comenzó a llorar de nuevo.

La madre lo volvió a sacar y regresó a sentarse en un mortero de arroz, bajo el tamarindo, cuando casi por encantamiento, su hijo dejó de llorar.

Pero al intentar dirigirse otra vez hacia su casa, el niño se despertó y comenzó a llorar con mucho más violencia aún.

Fue por eso que decidió pasarse la noche allí, bajo aquel frondoso árbol.

Apenas se había acomodado, cuando de repente, con un gran estruendo, todo la aldea se hundió en la tierra.

Donde hasta entonces habían estado las casas no quedaba sino un enorme agujero, que enseguida comenzó a llenarse de agua, hasta llegar hasta la base del tamarindo, donde la chica aterrada sostenía a su niño, apretándole muy fuerte entre sus brazos.

Pero nada sucedió, y en cuanto se hizo de día, consiguió salir corriendo, y se fue hasta la población más cercana que conocía - la de los sakalava -, para contarles lo que había sucedido ante sus propios ojos, y cómo sólo ellos habían podido sobrevivir.

Es por eso que, desde entonces, el lago adquirió un carácter sagrado, pues es sabido por todos los antankarana y sakalava, que en él viven los cocodrilos en los que se refugiaron las almas de los antiguos habitantes de la aldea desaparecida bajo las aguas.

Por esta misma razón, no sólo no se mata a esos reptiles, sino que hasta se les alimenta, sobre todo en ciertas fechas.

Y no sólo a esos cocodrilos que en él habitan, sino también al propio lago Antañavo y a aquel milagroso tamarindo, se les venera y acude cuando se precisa ayuda.

Así, cuando - por ejemplo - una pareja no acaba de tener hijos, va hasta el lago e invoca a las almas de los habitantes desaparecidos, pidiéndoles que se le conceda una numerosa descendencia, prometiendo, a cambio, volver para ofrecerles el sacrificio de animales para su alimento.

Cuando la petición tiene éxito, la pareja regresa al lago para cumplir su promesa.

Los animales se matan muy cerca de la misma agua, una parte de su carne se echa en ella y otra se reparte por distintas zonas del lago, más distantes, cuestión de que los cocodrilos se alejen lo más posible, ya que se cree que cuanto más se alejen mayor será la ayuda que proporcionarán.

Cuando un antakarana cae enfermo, se le lleva muy cerca del lago, y se le lava en sus aguas, puesto que afirman que así puede llegar a curarse.

Pero está prohibido bañarse allí así por que sí, e incluso hasta meter en ellas las manos o los pies.

Por eso, cuando uno necesita beber del lago, debe hacerlo con la ayuda de un recipiente dispuesto al final de una larga barra, y sólo puede tomar el agua a algunos pasos de la orilla.

También está prohibido escupir en o cerca de él, así como orinar o ir de cuerpo por sus alrededores.

A no ser que quien viole tales prohibiciones no tenga problema con lo de ser, más pronto que tarde, masticado por los cocodrilos...




-------------------------------------
lugares sagrados del mundo en
TAROT DE MáXIMO
fuente: Tzimay tzij - La jícara de los
cuentos (Elsa Son Chonay)
imagen: Michael Nichols para
National Geographic

*---Gora

*----Gora