El trébol de cuatro hojas es una variación infrecuente del trébol de tres, siendo este último el símbolo principal de la fiesta de San Patricio.
Según la tradición, tal variante trae muy buena suerte a sus buscadores, especialmente si es encontrada accidentalmente.
Así, según la misma creencia, cada foliolo representa uno de los supuestos cuatro componentes básicos de la felicidad:
El primero es para la esperanza.
El segundo es para la fe.
El tercero es para el amor.
Pero el cuarto agrega la fortuna.
A nivel científico todavía se discute si la generación del mismo está causada por razones genéticas o ambientales.
Es que su rareza sugiere un posible gen recesivo, que aparece con muy baja asiduidad.
A tal punto, que se ha estimado que hay aproximadamente 10.000 tréboles de tres hojas, por cada uno de cuatro.
Por tanto, el encontrarse uno de ellos ya es muy buena suerte!
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