Tchaikovsky soñaba con conocer al rey Ludwig de Baviera, cuyo nombre captaba por entonces la atención de toda Europa.
Llevaba mucho tiempo madurando la idea de componer la música dedicada al caballero de la Orden del Cisne.
Pero sin un encuentro con él, y sin haber visitado aquellos lugares, no podía componerla.
Finalmente, su sueño se cumplió en el cumpleaños de Ludwig.
El encuentro entre los dos ungidos siempre llega por destino, entrelazado misteriosamente.
Ludwig, de poco más de 30 años y Tchaicovsky con 36, se encontraron en el amanecer vital y creador de sus fuerzas e inspiraciones.
En la música que compuso finalmente, el segundo expresó proféticamente el pasional que les esperaba a ambos.
Diez años después de su encuentro, Ludwig fue capturado en su propio castillo y declarado loco.
Al igual que los cátaros, que se prepararon cien días antes de ascender a la hoguera, sabía lo que le esperaba, y ante la llegada de sus enemigos, despidió a todos sus criados y guardias, quedándose solo en el castillo.
Así que todo culminó con su muerte misteriosa en el lago.
Tchaikovsky sobrevivió a duras penas la muerte de su hermano espiritual.
Se culpabilizaba por ello.
Todos estos sufrimientos, sumados a la melancolía que le producía su matrimonio con Miliukova (una mujer muy problemática) hacen que - al igual que le ocurre Zigfrid, el protagonista del ballet El Lago de los Cisnes (que enamorado de Odette se termina comprometiendo con Odile, al ser engañado y confundido por el ambicioso mago negro, padre de esta) - termine tirándose al río Moscú, pero sobrevive.
Su proceder es tomado como el producto de una enfermedad mental, y como afectado de tal se le trata por años.
Pero tiempo más tarde, ya habiendo entregado El Lago de los Cisnes, muere envenenado, aunque no fue esa la causa que se consideró oficialmente.
Ahora, según la versión de Juan de San Grial (místico y esotérico, supuesto sucesor de los propios cátaros) en su libro El Piano como Orfeón (pág.304):
- Tchaikovsky acabó el ballet El lago de los cisnes cuando ya estaba iniciado.
Se puede comparar con La Flauta mágica del cristo vienés Mozart, una trama igual de esotérica e inenarrable sobre Minné y la virginidad.
En 1876, Luis de Baviera, el gran maestro del orden caballeresco del Cisne Blanco, reunió especialmente un sínclito de caballeros.
El tercer día, invitaron a Tchaikovsky a una conversación y quedaron muy satisfechos.
Dieron su consentimiento de consagrarlo como caballero.
Tchaikovsky experimentó un estremecimiento al ser introducido en las salas caballerescas.
Quería escribir una ópera sobre el Grial, pero los caballeros no le dieron su bendición para ello: la iniciación no era completa.
Los caballeros tenían una gran gracia con una consagración particular a la Reina-Cisne, un carácter pacífico y hermoso.
En los misterios nocturnos, se iluminaban de luz.
Parecía que faltaba muy poco, y se convertirían en cisnes blancos.
Pero en la noche del tercer al cuarto día, a Tchaikovsky le fue revelado el secreto del lago de los cisnes: la entrada en el reino del Santo Grial!
En el siglo presente, solo los purificados que han pasado la escalera de 15 escalones pueden alcanzarlo.
El rey Ludwig aseguraba que los cisnes blancos eran divinidades misteriosas, que habían aceptado la imagen de aves nobles, siendo en realidad vírgenes hiperbóreas descendidas a la Tierra...
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TAROT DE MáXIMO
fuente: lanuevaatlantidadelsol.blogspot.com
& elgrialmusical.blogspot.com
imagen: Swan Lake por Alex Timmermans
(Story Telling project)
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