Nació el 8 de mayo de 1920 en el pequeño poblado de Arroyo de Oro (hoy Mendizábal) en el departamento (provincia) de Treinta y Tres, Uruguay.
Vivía con su madre, su tío, su abuelo y su pequeña hermana, a la que él adoraba, en una pequeña extensión de campo en la que trabajaban, y con cuyos productos sobrevivían.
La noche del 7 de mayo del año 1929, luego de haber cenado en familia, hubo una discusión del abuelo con su hija, la madre de Dionisio.
Sumido en un ataque de locura, el hombre tomó su facón (cuchillo de paisano) y se dirigió hacia esta, apuñalándola y dándole muerte.
Cuando el niño se dio cuenta, corrió en busca de su tío.
El mismo, al ser enterado por este, salió en busca del hombre, trabándose en lucha con él.
En ella resultaron gravemente heridos tanto el tío como el propio Dionisio.
El niño tomó a su hermana, antes que el hombre enloquecido la alcanzara, y logró ocultarse de él - cubriendo su herida con un trozo de sábana - y esperó por horas la ocasión para escapar.
Finalmente caminó 9 kilómetros hasta el entonces Poblado del Oro, donde dejó a su hermanita en un destacamento policial.
Fue así que la salvó.
A él lo vio el médico local que ordenó su internación inmediata en el hospital departamental de Treinta y Tres, pero recién al otro día un automóvil particular de un habitante de Vergara (pueblo cercano) arribó al lugar, para trasladar a Dionisio.
El abuelo ya se había suicidado.
Y el niño falleció en el camino debido a la gangrena en sus tejidos, causada por el excesivo tiempo que estuvo sin asistencia.
Su tragedia es evocada como un verdadero ejemplo de estoicismo y lucha ante la adversidad.
Ojalá no fuera más que otra leyenda, pero lamentablemente sucedió entonces, y sigue sucediendo ahora.
No sólo por las consecuencias de la violencia doméstica, y el maltrato a los niños, sino también por la falta de asistencia en las localidades del interior de nuestros países, que a veces deja morir personas por falta de ambulancias y otras negligencias más.
En el Tarot el arcano XII, El Colgado, es el héroe que pende en el vacío, y que representa a los que se han sacrificado en pos del bien de los demás, como colgó del fresno iggdrasil el dios Odín de la mitología nórdica, o de la cruz el Jesús de los cristianos.
Así lo hizo también - salvando cualquier distancia - este pequeño Dionisio para salvar a su hermana.
Pero - en la simbología menos altruista de la carta - es a su vez la falta de acción responsable y la ineptitud o desinterés de las autoridades competentes, las que debieran encargarse, pero a las que pareciera ni importarles tomar las medidas necesarias para que las tragedias como esta no se repitan jamás...
Aquí en ocasión de mi vista a su estatua
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el tarot en los hechos (historias que atender) en
TAROT DE MáXIMO
imagen: monumento a Dionisio Díaz,
de José Belloni, en Bvr. Fructuoso del Puerto
y Tenientes de Artigas (Treinta y Tres)
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