Pesa 30 toneladas y está enterrado a cinco metros de profundidad!!!
Arqueólogos egipcios se preparan para abrirlo.
Está tallado entero en granito y datado en más de 2.000 años de antigüedad.
Lo que no se sabe es quién o qué hay adentro.
Fue descubierto inesperadamente el primero de este mes (1 julio 2018), en una construcción en la antigua ciudad portuaria de Alejandría - al norte del país - durante la instalación de sensores en un terreno particular del barrio de Sidi Gaber, antes de que el dueño desistiera de construir cimientos, puesto que la ley egipcia estipula la realización de excavaciones arqueológicas antes de iniciar construcciones.
- Es uno de los más grandes encontrados por sus 265 centímetros de largo, 185 centímetros de alto y 165 centímetros de ancho - aseguró Mostafa Waziri, director del Supremo Consejo de Antigüedades de Egipto.
El hallazgo entusiasmó más aún a los especialistas, porque la capa de mortero que sella la tapa indica que su contenido se ha mantenido inalterado desde que fue enterrado.
Esto es muy raro porque el patrimonio artístico egipcio siempre ha sido objeto de codicia por parte de los saqueadores de tumbas que han profanado estos enclaves desde épocas remotas.
Y además no está solo.
A su lado se encontró una cabeza tallada en alabastro.
Lo extraño es que parece haber sido desfigurada de forma intencionada.
Todo ello lleva a plantearse muchas preguntas: quién está dentro, qué artefactos también podrían estar enterrados allí y por qué el sarcófago es tan grande.
Por otra parte, el que esté sin abrir también presenta el dilema de si abrirlo en absoluto.
Según informa Live Science, los expertos pueden decidir, para evitar daños, utilizar rayos X, tomografías computarizadas y otras pruebas científicas para determinar los contenidos de la tumba sin tener que hacerlo.
De todas formas, los arqueólogos creen que pertenece al período Ptolemaico temprano (305 - 30 a.C.), cuya denominación hace referencia a la última dinastía de faraones que gobernó Egipto hasta que la región fue convertida en una provincia romana.
- Suponemos que la tumba pertenece a uno de los altos dignatarios de ese período - dijo por su lado Ayman Ashmawy, director del Departamento de Antigüedades Egipcias.
- Esperamos encontrar objetos que nos ayuden a identificarlo - agregó.
Hasta este momento, y aunque tiene una larga historia en el Egipto Antiguo, la ciudad de Alejandría tampoco había sido objeto de mucha atención por parte de los arqueólogos.
La razón es que la actual Alejandría se construyó sobre los restos de la fabulosa ciudad fundada por el conquistador macedonio Alejandro Magno (el Grande) y gobernada desde que falleciera por su general y amigo Ptolomeo - el faraón Ptolomeo I - y sus descendientes.
Poco a poco y a través de pequeños proyectos de arqueología urbana, los restos de la antigua Alejandría han ido apareciendo.
En 2005 encontraron por fin la localización de su mítica biblioteca y del faro que iluminaba su puerto y que estaba considerado una de las maravillas de la Antiguedad.
El río Nilo también ha cambiado su curso con el paso de los siglos y grandes partes de la antigua Alejandría están bajo el agua, esperando ser descubiertas...
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