Cuenta la leyenda que un joven príncipe persa, llamado Farhad, estaba profundamente y locamente enamorado de la doncella Shirin.
Un día, le llegaron falsas noticias de que su amada había sido asesinada.
Desesperado, sin esperar para saber la verdad y destrozado de pena, montó su caballo preferido y galopó hasta un acantilado, desde donde se lanzó a morir.
De sus numerosas heridas y gotas de sangre, en el suelo brotó un tulipán, como símbolo de su enardecido amor.
Por ello, desde la antigua Persia el tulipán rojo ha sido consideraba el símbolo por excelencia del amor apasionado, ese tipo de sentimiento sin rienda que llevó a aquel enamorado enceguecido a ni siquiera poder imaginar su vida sin estar al lado de su amante.
Y todo el que sueñe con uno de ellos ha de saber que su anuncio es el de la próxima cercanía de alguien que podría generarle lo mismo.
Del mismo modo, quien reciba un ramo de tulipanes pronto estará en el medio de una tormentosa relación, más basada en la pasión y lujuria que en un sentimiento real, así que lo ideal sería evitar recibirlos, a no ser que sea justamente ello lo que anda buscando.
Sin embargo, estando advertido y sabiendo canalizar el poder y fuerza que estas flores simbolizan y poseen, puede también llegar - al tenerlas cerca -, a encontrar el tono de armonía necesario para elevar y redimensionar su espíritu en el eje central de la más auténtica comprensión y verdadero amor...
--------------------------------------
elementos de poder en
TAROT DE MáXIMO
POSTS POSTERIORES
PRINCIPAL
