La ciencia divide la naturaleza en tres grandes grupos: El reino mineral, el reino vegetal y el reino animal.
El esoterismo también divide la Creación en múltiples reinos.
Los anteriores (mineral, vegetal y animal) más el humano - que en esta corriente es considerado un reino separado del animal - son los reinos visibles.
También existen los reinos invisibles ubicados en los planos sutiles - que son el etérico, astral, mental inferior, astral superior, mental superior y de ahí hacia 'arriba', o mejor dicho hacia lo más sutil, ya que en realidad todos los planos se interrelacionan (como las muñecas pequeñas dentro de una más grande matrioska rusa), y seres como nosotros, los humanos, poseemos un vehículo adecuado para cada uno, que actúa en simultáneo con los otros (cuerpo físico, doble etérico, astral o alma, mental y espíritual) -.
Y todos se interrelacionan entre ellos, y dependen mutuamente para la sobrevivencia del conjunto.
Mientras más se asciende en frecuencia vibratoria (la velocidad e intervalo con la que se mueven los átomos y partículas que lo componen, como en las octavas musicales), más se acercan al aspecto espiritual del universo, el reino más elevado o sublimado que es del Espíritu Supremo, al que muchos llamamos Dios.
Mientras más se desciende, más se acercan los reinos al aspecto más físico del universo, el más bajo, material o denso, que es el reino mineral.
O sea que se diferencian por el nivel de CONCIENCIA y ENERGÍA que manejan.
En el reino espiritual supremo la Conciencia es total, y la Energía está en estado latente.
A medida que los reinos van descendiendo (densificándose o materializándose, reduciendo su tasa vibratoria), la Conciencia se va restringiendo a favor de la Energía, hasta que en el reino mineral se invierte totalmente la situación.
Ahí la Energía está concentrada al máximo, y la Conciencia está dormida.
Pero ninguno de ellos es fijo o inmóvil, al contrario, los seres que los componen están en un continuo desarrollo, ya sea evolucionando hacia la divinidad (arco ascendente), ya sea involucionando hacia la materia (arco descendente).
A este continuo movimiento se le llama en esoterismo 'círculo de la necesidad', y es representado simbólicamente por un Ouroboros (la serpiente que se muerde la cola).
Mónadas (o 'ego mentales') son las unidades primarias de la Conciencia Cósmica (así como las gotas lo son del Océano).
Ellas van a evolucionar reencarnando innumerables veces a través de todos estos diferentes reinos.
Al final de un ciclo cósmico las mónadas que hayan terminado de desarrollarse en un reino, en el siguiente comenzarán un nuevo desarrollo en el que sigue (hacia arriba o hacia abajo, como dijimos antes).
Así las del reino mineral pasaran al vegetal, y las que estaban en el vegetal animal, etc.
En cada uno tendrán funciones específicas para desempeñar, ya que este sistema es parecido - otra vez salvando las distancias, valga la comparación - a los del cuerpo: Sanguíneo, nervioso y demás, todos dependiendo de los otros para que el organismo completo funcione correctamente.
Mientras más se especializan en sus funciones particulares, más ampliamente se diferencia de las entidades de los otros reinos, a pesar de que esas diferencias no son tales cuando se encuentran en una etapa primaria o germinal de desarrollo.
Por eso aquello de que 'fulana/o es una víbora', 'se puso como una fiera', muchas veces no es sólo una alegoría, porque podría ser que de veras ese ser esté recién en su primera encarnación humana, sin estar aún consiguiendo dejar atrás los resabios de su antigua identidad animal, lo que sin dudas hará en el curso de posteriores encarnaciones.
En conclusión, partiendo de nuestro propio reino, podemos dividir a los otros en tan sólo dos grupos.
Estos son:
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REINOS INFERIORES
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Corresponden a los reinos cuya consciencia es inferior a la del ser humano, como tal los seres que componen esos reinos son agentes irresponsables de la Ley que opera a través del universo (no generan kharma).
Los Maestros dicen
- Por debajo del hombre hay tres en la región objetiva (animal, vegetal, mineral) y tres en la subjetiva (plano etérico y astral), que con el hombre hacen un septenario.
Dos de los tres primeros nadie, salvo un iniciado, podría concebirlos.
El tercero es el reino Interior bajo la corteza terrestre, que podríamos nombrar pero que nos sentiríamos embarazados en describir (demonios)... -
Esos tres reinos sutiles (región subjetiva) que preceden al mineral son conocidos como Elementales, y los hay por cada uno de los elementos físicos básicos - Fuego, Agua, Aire, Tierra y Éter - con toda una jerarquía, organización y funciones (a partir del Elohim o Rey de cada corriente), al igual que en los superiores.
Los Elementales son seres que en este viaje del círculo de la necesidad se encuentran en el arco descendiente, involucionando hacia la materia, y ya están cerca del mundo físico, pero todavía no han tenido cuerpos físicos.
Los más conocidos son los espíritus de la naturaleza (gnomos, hadas, etc.) que tienen por tarea mantener funcionando la naturaleza, así como concebirla.
Sin ellos la energía regresaría a su estado sutil, y no podría existir el mundo tal como lo percibimos con nuestros sentidos.
Pero no debe confundirse a estos Elementales con los Elementarios, que son creaturas desencarnadas (que ya tuvieron cuerpo), la mayoría nocivas, como fantasmas y otros habitantes del bajo astral.
Cuando hablamos de 'planos' también significa
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REINOS SUPERIORES
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Ya sabemos que son los ocupados por todos los seres superiores al hombre, que tienen la función de crear, animar, guiar y controlar al universo.
Conocidos como Dhyani-Chohanes o 'Señores de Luz', son definidos por el Glosario Teosófico como 'las inteligencias divinas encargadas de la supervisión del cosmos'.
- Ellos son las fuerzas inteligentes que le dan y establecen en la naturaleza sus leyes, mientras que ellos mismos actúan de acuerdo a leyes que les son impuestas de manera similar por poderes aun más elevados.
Esta Jerarquía de seres espirituales, a través de los cuales la Mente Universal entra en acción, es semejante a un ejército, compuesta de divisiones, brigadas, regimientos, etc...-
Correspondiendo a diferentes escalas de la creación, se subdividen en los que se ocupan de todos los sistemas cósmicos, los que lo hacen específicamente de nuestra cadena planetaria (sistema solar), y los que lo hacen de la presente raza humana.
Entre nosotros son conocidos como Logos Cósmico, Logos Solar, Dioses 'menores', Espíritus planetarios, Ángeles, Arcángeles, Santos y Maestros Ascendidos, entre otras subdivisiones.
Y por supuesto, todos, desde el más inferior de los Elementales, hasta el más grande Dios de un sistema de mundos (que nuestro final destino, antes de volver a fundirnos en Unidad con el Padre), vibran y canalizan alguna de las siete virtudes o características primarias (entre las que se cuentan las Cardinales o 'Santas Criaturas vivientes') y esenciales del altísimo, la divinidad original y superior, que es YHVH - él/la innombrable -, y cuya Presencia Divina (llamada Yo Soy por varias corrientes espirituales) se expresa en nosotros a través de un reductor energético (el Cristo Interno) brindándole a la mónada esa alma que según el kharma que haya estado generando, será la que irá encarnando, aprendiendo y desarrollando diferentes cuerpos, personalidades, potencialidades y destinos…
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curiosidades y temas relacionados en
TAROT DE MáXIMO
fuente: Cid (esoterismo-guía),
glosario teosófico y otros
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